Como ya sabemos, una buena escritura es clave a la hora de transmitir nuestras ideas a los lectores, que, en muchos casos, pueden llegar a ser clientes potenciales para nuestra marca. Muchos creemos que escribir es una cualidad viene dada por alguna divinidad, pero estáis de suerte, porque no es verdad. Todo en esta vida se puede aprender y en este post vamos a recopilar técnicas para mejorar la escritura en tus textos. ¿Empezamos?
En este artículo descubrirás:
ToggleLee mucho antes de empezar a escribir
¿Cuántas veces nos han dicho en el cole que hay que leer mucho para poder escribir bien? ¿Te cabreaba tanto como a mí? (Yo odiaba que me obligasen a leer, me hacían aburrir algo que me apasionaba). Pero hoy puedo decirle a todxs mis profes de Lengua que realmente es de los consejos más útiles. Y es que para generar una buena base en nuestra escritura tenemos que leer.
Leyendo ampliamos nuestro vocabulario, agilizamos la mente y descubrimos nuevas estructuras gramaticales que nos pueden ayudar a dotar de intencionalidad a nuestros textos. Por ejemplo, yo he aprendido muchas palabras sin traducción leyendo la saga de Reina Roja.
Y sigo con los ejemplos, porque no es lo mismo decir:
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Organízate antes de empezar
Muchas veces nos ponemos a escribir a lo loco, sin tener claramente estructurado en la cabeza lo que queremos expresar. Si llevas toda la vida escribiendo, tal vez no se te de mal la improvisación, pero lo mejor va a ser organizarnos.
Los esquemas e ideas escritas a mano nos ayudarán a ver con claridad y estructurar lo que queremos decir y cuándo, además de dejar fluir nuestra creatividad sobre el papel con recursos como dibujos, flechas y colores.
Además, os recomiendo que hagáis un ejercicio que una buena amiga (Mireia) recomienda mucho. Y es que todos los días escribáis algo. Unas páginas que os hagan canalizar vuestros pensamientos y, ya de paso, mejorar vuestra escritura. Y si es a mano mejor: lo que no se puede borrar, es más fácil de analizar.
Al escribir, no te compliques demasiado
Que vale, es probable que tengas que escribir algo técnico. Pero yo hablo de la escritura más creativa, de la de venta, la que tiene que enamorar a tu target. El objetivo de la escritura es transmitir una idea y que el máximo número de personas nos entienda, por eso es importante utilizar un vocabulario simple.
Muchos pecamos de utilizar palabras difíciles y frases enrevesadas y pomposas para parecer más profesionales, pero al final acabamos por crear un texto imposible de entender. Sobre todo, cuando no estamos seguros de lo que estamos diciendo.
Las frases cortas y concisas suelen funcionar de maravilla, además de intentar evitar la repetición de la misma palabra, para ello, es recomendable tener a mano un diccionario de sinónimos.
Separa las ideas por bloques
Nuestros textos también deben resultar atractivos incluso antes de empezar a leerlos. Es importante separar por párrafos y que en cada uno de estos se encuentre una idea diferente.
Hay que tener cuidado para que nuestros párrafos no excedan las cinco o seis líneas, puesto que no queremos perder legibilidad. Esto último también nos ayudará a sintetizar lo que tenemos que decir en ideas más cortas y fáciles de entender para los lectores.
Además, recuerda la norma del bocadillo invertido: Jamón-Pan-Jamón. Lo bueno, la chicha (que dicen por mi zona) tiene que verse reflejado tanto al inicio como al final. Frases con gancho, atractivas y con potencial son las que mantendrán a lxs lectores enganchados y con ganas de más.
Cuida tu lenguaje al escribir
Algo que parece muy obvio pero que quizás no lo es tanto es que siempre tenemos que hablar de nuestras ideas en positivo. Algunos recursos son escribir siempre frases enunciativas, evitando las pasivas y utilizar (sin pasarse) adjetivos positivos que refuercen las cualidades de nuestro servicio, producto, idea etc.
Gracias a estos recursos conseguiremos hacer nuestro texto más atractivo y evitar así que se convierta en una lectura pre-siesta. Saber utilizar las frases negativas y hacer que estén correctamente empleadas es una tarea bastante complicada y que se perfecciona con el tiempo. Así que, si estás empezando, te recomiendo optar por un lenguaje más positivo.
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Cambia, ¿verdad?
No te olvides escribir tu conclusión
Y como toda (o casi toda) buena película cuenta con un buen final, el de nuestro texto también le tiene que hacer justicia. Una pequeña conclusión donde se sinteticen las ideas clave siempre es un buen recurso. Con esto conseguiremos reforzar dichas ideas para que calen más en nuestros lectores y ganaremos veracidad.
Otras formas de acabar que suelen llamar la atención pueden ser terminar con una pregunta que genere un debate o acabar como empiezas: las estructuras cíclicas suelen tener buena acogida entre los lectores. Nuestra forma de acabar muchas veces determinará si el lector querrá volver a leernos en el futuro.
Revisa lo que escribes, pero no te obsesiones con ello
Más de un copy va a querer acabar conmigo ahora mismo, pero mi consejo en base a la experiencia propia es este. Es importante tener nuestro texto con tiempo para que nos dé tiempo a corregirlo. Y no nos referimos solo a las faltas de ortografía (gracias, Word), sino a nuestra redacción y forma de expresar nuestras ideas.
Lo ideal sería cerrar nuestro portátil una vez terminamos y darnos unas horas para desconectar: salir a tomar algo, dar un paseo o incluso dormir. Una vez hayan pasado unas cuantas horas y nos hayamos despejado, nos daremos cuenta, al releerlo, de los fallos de redacción y podremos corregirlos para mejorar la legibilidad de nuestro texto.
Pero, ahora viene el “pero”, no nos tenemos que obsesionar con la corrección. Si os soy sincera yo solamente hago un par de correcciones. Una en el momento de acabar para revisar faltas y expresiones, y otra al tiempo para reorganizar las ideas.
Cuando empecé a escribir, le daba muchas vueltas y cambiaba cosas que creía que no estaban del todo bien. Con el tiempo me he dado cuenta de que lo que hacía era enrevesar más los textos. A mí es lo que me funciona, ¿y a ti?
Y es que, no puedo darte la clave del éxito para que tus textos triunfen, pero seguro que, siguiendo estos consejos, la lectura se hará mucho más amena y nuestros lectores tendrán ganas de volvernos a leer. Y cada día cogerás mucha más práctica y escribirás mejor. ¿Quieres ver un texto mío de 2015?
Como ves, todo es práctica y si ahora tuviese que escribir ese artículo sería mucho mejor. Pero son mis principios escribiendo y me encanta pasarme a leerlos de vez en cuando. Espero que estos tips para mejorar la escritura y saber escribir cada vez mejor te sirvan.
¿Y tú? ¿Añadirías alguna otra técnica para mejorar la escritura en esta lista? Y si necesitas ayuda con tus textos, ¡escríbeme!